El Santceloni, el restaurante en Madrid de Santi Santamaría, y el sevillano Hacienda de Benazuza, impulsado por Ferran Adrià, se hacen con su segunda estrella Michelin, mientras que otros 16 restaurantes logran su primera estrella.
Estos son:
Alkimia (Barcelona), Hofmann (Barcelona), Les Cols (Olot, Girona), El Cingle (Vacarisses, Barcelona), Estany Clar (Cercs, Barcelona), Hispania (Arenys de Mar, Barcelona), Real Balneario (Salinas, Asturias), La Seu (Denia, Alicante), El Rincón de Antonio (Zamora), Miramon Arbelaitz (San Sebastián), El Portal (Ezcaray, La Rioja), Posada del Abad (Ampudia, Palencia), A Reixidora (Bentraces, Orense), Altair (Mérida, Badajoz), Víctor Gutiérrez (Salamanca) y Alejandro (Valencia).
Ningún restaurante pasará de este año de dos a tres estrellas. Esta codiciada máxima puntuación sigue únicamente estando en manos de Arzak, Martín Berasategui, El Bulli y Can Fabes. Siguen con dos estrellas Tristán (Portals Nous, Mallorca), Atrio (Cáceres), Akelare (San Sebastián), El Celler de Can Roca (Girona), La Broche (Madrid), Girasol (Moraira, Alicante), Zuberoa (Oyarzun, Guipúzcoa) y Sant Pau (San Pol de Mar, Barcelona).
Con una estrella hay ya 91 restaurantes. Siete de ellos pierden la única estrella que hasta ahora poseían, Taberna de Viavélez (Asturias), Jordi Parramón (Vic) y Ca’s Puers (Sóller, Mallorca), lo hacen por cese de negocio, y La Seu, por traslado a Denia (Alicante). Los tres restantes son Loliña (Carril, Pontevedra), Urepel (San Sebastián) y Gozeiko Kabi (Madrid).