El turismo internacional ha atravesado los últimos meses uno de los peores momentos de su historia desde la crisis de principios de los años 90.

Según el último informe publicado por la Organización Mundial de la Salud (OMT) se prevé una recuperación del sector en el segundo semestre de 2002, coincidiendo con las previsiones de recuperación de la economía mundial - los viajes de negocios se reanudarán y los consumidores recuperarán la confianza.

En este contexto internacional, las cadenas hoteleras españolas se han defendido relativamente mejor. De hecho, los hoteles españoles han afrontado la crisis del 11-S mejor que otros países.

El año 2001 -según el informe de Zontur- fue un buen año para el turismo español, con un nuevo  récord de visitantes: 49,5 millones de turistas, lo que representa un aumento del 3,4 % en número e ingresos. Este dato de España contrasta con el del turismo mundial en el mismo período, que descendió un 1,3 %.
En España, solamente Baleares registró una caída en el número de visitantes en 2001 debido al fuerte descenso del mercado alemán, muy afectado por la recesión. El resto de comunidades autónomas tuvo un buen comportamiento, en especial Madrid, que creció un 10%.

La tendencia en España en el último cuatrimestre ha sido, por el contrario, a la baja.

Las cadenas hoteleras españolas ha aguantado la crisis como han podido, soportando menores ingresos y tratando de reducir los precios y así animar los niveles de ocupación.

Según los datos del Instituto Nacional de Estadística, INE, la ocupación hotelera ha descendido en España un 3,7 % en los últimos 12 meses, con una fuerte incidencia en visitantes extranjeros.
Del total de viajeros, 1,82 millones proceden de España, lo que supone un 63,3 % del total y un 2,21% menos que en enero de 2001. Al mismo tiempo, 1,05 millones fueron extranjeros, un 33,6%, lo que supone un descenso del 6,14 %.

Para la Federación Española de Hoteles, España debe actuar como lo que es, un líder del sector, y desarrollar estrategias en los principales mercados, como el Reino Unido y Alemania, dos países que representan el 50% de los turistas que llegan a nuestro país.