Sobre Francia pende la amenaza de una multa que podría imponerle la Unión Europea, porque es posible que el gobierno en París todavía no haya levantado las restricciones a la importación de carne de vacuno británica. La Comisión Europea ha comunicado que  envió a París un segundo recordatorio, por cuanto Francia todavía no ha informado a las autoridades de la Unión Europea si ha cumplido con lo requerido por la Corte Europea de Justicia (CEJ), permitiendo que la carne de vacuno británica pueda ser importada nuevamente. Según se informa, Francia tiene ahora 15 días de plazo para cumplir con el requerimiento. De no hacerlo, según lo manifiesta la portavoz de David Byrne, Comisario de los Consumidores de la Unión Europea, la Comisión recurriría nuevamente a la CEJ y solicitaría que se imponga una multa por falta de acatamiento.