La Comisión Europea ha propuesto una serie de modificaciones de la ayuda financiera prestada a los pescadores de la UE. En una audiencia pública organizada por la Comisión de Pesca del Parlamento Europeo el 29 de marzo de 2005, algunos representantes de la industria pesquera criticaron las medidas propuestas.


De conformidad con la propuesta de la Comisión, el actual Instrumento Financiero de Orientación de la Pesca (IFOP) será sustituido por el Fondo Europeo de Pesca (FEP). El fondo, que abarcará el periodo 2007-2013, tendrá un presupuesto anual de 700 millones de euros para contribuir a reducir la presión pesquera, con objeto de permitir la recuperación de las poblaciones de peces y fomentar el uso de equipos y prácticas más respetuosos del medio ambiente en la pesca y la acuicultura.

Durante la audiencia, numerosos representantes de la industria pesquera insistieron en que las normas propuestas ponían en peligro la viabilidad socioeconómica de la actividad de los pescadores. Según Frederico Pereira, sindicalista portugués, esas normas financieras no son satisfactorias. "Es necesario contar con unas indemnizaciones adecuadas para todo el periodo durante el que se aplican las restricciones", afirmó el Sr. Pereira, puesto que, en caso contrario, añadió, “cuando se recuperen las poblaciones de peces, ya no habrá pescadores”.

Otro portavoz, Guy Vernaeve, señaló que, a pesar de algunas novedades interesantes, como la simplificación de los trámites administrativos, “el resto de la propuesta de la Comisión es una fuente de enorme preocupación”. El Sr. Vernaeve criticó especialmente las medidas propuestas para garantizar el desarrollo sostenible de las zonas de pesca costeras, ya que sólo las que cuenten con menos de 100 000 habitantes serán destinatarias de ayudas.

Pier Salvador, representante de la industria acuícola, señaló que se presta una atención excesiva a los aspectos medioambientales, lo que, añadió, conducirá a la reducción de la producción y el consiguiente aumento de las importaciones de pescado, algo que podría significar que los consumidores de la UE correrán el riesgo en el futuro de tener que comprar productos de calidad inferior.

Contrariamente a otros portavoces, Stephanie Schmidt, del WWF Alemania, valoró más positivamente la propuesta de la Comisión. Según sus propias palabras, “se ha simplificado el marco regulador, se ha subrayado la importancia de la protección del medio ambiente y los recursos naturales y se presta un apoyo firme a la aplicación de una serie de planes de recuperación y gestión de los recursos pesqueros”.

Al término de la audiencia, David CASA (PPE-DE, Malta),  quien se encargará de elaborar el informe del Parlamento Europeo sobre el FEP, subrayó la importancia de contar con un sector pesquero sano en el futuro y dijo que “el medio ambiente y el sector pesquero deben ir de la mano”. Según este diputado, se deberían abordar las repercusiones socioeconómicas de la normativa sobre la industria pesquera.

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