|
30/08/2005
La economía española mejora una décima su ritmo de crecimiento trimestral, hasta alcanzar el 3,4%
-La economía española acelera su crecimiento interanual al 3,4% en el segundo trimestre de 2005.
-El crecimiento intertrimestral del PIB se sitúa en el 0,9%.
-La demanda interna mantiene su aportación al crecimiento agregado (6 puntos), mientras que la demanda externa reduce su contribución negativa al PIB trimestral de –2,7 puntos a –2,6 puntos.
-El empleo de la economía crece a un ritmo del 3,2%, lo que supone una creación neta de 547 mil puestos de trabajo a tiempo completo.
-El coste laboral unitario crece un 2,5%, situándose 1,7 puntos por debajo del deflactor del PIB.
El Producto Interior Bruto (PIB) generado por la economía española en el segundo trimestre de 2005 ha registrado un crecimiento del 3,4% respecto al mismo período del año anterior, ofreciendo un perfil suavemente acelerado. El crecimiento intertrimestral se sitúa en el 0,9%, tasa idéntica a la del trimestre precedente.
Analizando los distintos componentes del PIB, se observa que la demanda interna aporta 6 puntos al crecimiento agregado, cifra idéntica a la del período anterior. Este resultado seçproduce como consecuencia conjunta de la expansión de la demanda de inversión en capital fijo, así como de la desaceleración del gasto en consumo final.
Por su parte, la demanda externa mejora una décima su contribución negativa al crecimiento agregado, hasta situarla en –2,6 puntos.
El gasto en consumo final de los hogares presenta un crecimiento interanual estabilizado del 4,8%, en el que se aprecia especialmente el dinamismo tanto de la demanda de bienes duraderos como de servicios.
Por su parte, el consumo colectivo de las Administraciones Públicas registra un crecimiento del 4,6%, frente al 5,5% del trimestre anterior, en línea con la evolución de la remuneración de asalariados públicos y de las compras de bienes y servicios de estas administraciones.
La formación bruta de capital fijo muestra un crecimiento acelerado (7,5% frente a 7% en el periodo anterior) como resultado del impulso que registran todos sus componentes.
La inversión en bienes de equipo registra el crecimiento más elevado (10,4%), como consecuencia fundamental del dinamismo de la importación de este tipo de bienes. Por su parte, la construcción muestra un ritmo de avance más atemperado, acorde con una evolución similar tanto de la obra civil como de la edificación.
La exportación de bienes y servicios ha registrado un crecimiento positivo (1,9%) repuntando el dato desfavorable del primer trimestre del año (-1,9%). Esta recuperación se ha producido en todos sus componentes, tanto en los bienes, como en los servicios, incluido también el turismo.
Esta favorable evolución de las exportaciones ha compensado el impulso que también muestran las importaciones (8% frente a 5,6% del trimestre precedente), mejorando en una décima la contribución del sector exterior al crecimiento agregado de la economía.
Desde la óptica de la oferta destaca la aceleración que exhiben los servicios orientados al mercado (4,3%), hecho que se aprecia en los indicadores de actividad de estas ramas.
Especialmente notable es el comportamiento de los servicios de tecnologías de la información y las comunicaciones, de los servicios a empresas y del comercio.
La construcción, en línea con la demanda de este tipo de bienes presenta una suave aceleración (5,7%). Por su parte, las ramas industriales desaceleran su crecimiento (0,5%), acorde con la evolución del Indice de Producción Industrial.
Finalmente, las ramas primarias moderan su carácter contractivo (del –1,7% al -1%), si bien presentan un registro de crecimiento negativo por quinto trimestre consecutivo.
El empleo, medido en términos de puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo, registra un incremento interanual del 3,2%, manteniendo una pauta acelerada. Esta tasa supone un incremento de 547 mil empleos netos en un año. Los rasgos más destacables son, por un lado, la continuidad del dinamismo del empleo en la construcción y, por otro, la estabilización de la ocupación en los servicios de mercado. El incremento de la productividad aparente del factor trabajo se sitúa en el 0,2%, una décima inferior a la del trimestre anterior.
El PIB valorado a precios corrientes registra un crecimiento del 7,7% en el segundo trimestre de 2005, lo que implica un crecimiento del deflactor implícito del 4,2%, registro idéntico al del trimestre anterior.
Atendiendo a la distribución primaria de las rentas, la remuneración de asalariados muestra un crecimiento acelerado del 6,3%, como consecuencia del impulso que registra el número de asalariados.
Este comportamiento ha dado lugar a un crecimiento del coste laboral por unidad de producto del 2,5%, una décima más que en el periodo anterior. Por otro lado, el excedente bruto de explotación y las rentas mixtas aceleran su crecimiento (9,4% frente a 9% en el trimestre precedente). Finalmente, los impuestos netos de subvenciones aumentan su ritmo de avance al pasar de un 8,7% en el primer trimestre a un 9,7% en el de referencia.
Fuente: Instituto Nacional de Estadística
|
|